¿Cuáles son las complicaciones y riesgos de la liposucción?

Hoy en día, una de las intervenciones más comunes en todo el mundo es la liposucción que es, además, una de las técnicas quirúrgicas más refinadas y seguras. Sin embargo, todavía hay mujeres que se preocupan por las posibles complicaciones. Por ello, hoy desde nuestra clínica estética en Valencia hablamos sobre cuáles son las complicaciones y riesgos de la liposucción. ¡Así podrás estar preparada para cualquier imprevisto!

Si confías en un buen cirujano, con un equipo especializado y con muchos años de experiencia a sus espaldas no tendrás de qué preocuparte.

Complicaciones y riesgos de la liposucción

Aunque la liposucción es una técnica que se lleva realizando mucho tiempo y que, por lo tanto, ha evolucionado mucho, siempre existen riesgos y está bien que el paciente que se somete a la intervención los conozca.

No obstante, ten en cuenta que, si confías en un buen cirujano, con un equipo especializado y con muchos años de experiencia a sus espaldas no tendrás de qué preocuparte. Estos riesgos que vamos a mencionar se minimizan enormemente al hacerte la liposucción con los profesionales adecuados.

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Posibles riesgos de la liposucción

A continuación, te indicamos los principales riesgos de la liposucción:

  • Hematomas. El primer riesgo es el sangrado. Es algo relativamente frecuente, por lo que es posible que, durante la intervención o posteriormente, aparezca algún hematoma. En cualquier caso, son problemas leves y que suelen resolverse espontáneamente.
  • Infección. La infección también es posible, aunque muy rara, porque tanto los quirófanos como el instrumental que se utiliza están esterilizados y, tras la intervención, se prescriben antibióticos con el objetivo de prevenir cualquier tipo de infección. También es importante seguir las indicaciones del cirujano para realizar correctamente los cuidados después de una liposucción.
  • Cambios en la sensibilidad cutánea. Esto es más frecuente, pero, por suerte, siempre es temporal. Es posible que, tras la intervención, durante los primeros meses, notes cambios en la sensibilidad cutánea, una sensación como de acorchamiento en la piel.

En algunos casos, las cicatrices resultantes de la intervención pueden tener una apariencia más marcada de lo que se esperaba

  • Cicatrización. En algunos casos, las cicatrices resultantes de la intervención pueden tener una apariencia más marcada de lo que se esperaba. Muy a menudo, una mala cicatrización se debe a que la paciente no ha seguido al pie de la letra las recomendaciones hechas por el doctor o a su propia cicatrización condicionada genéticamente. Aún así, debes tener en cuenta que existen tratamientos con los que podrías disimular las cicatrices en caso de que fuera necesario.
  • Irregularidades del contorno de la piel. En ocasiones, estas irregularidades son visibles y palpables, en cuyo caso es recomendable algún tratamiento adicional. No obstante, aunque es una complicación rara, puede ser más frecuente en pacientes que presentan una piel fina antes de la operación, a la cual le va a costar más adaptarse al nuevo contorno corporal.
  • Asimetría. Tras la liposucción, es posible que el resultado no sea perfectamente simétrico. Por supuesto, se intenta que así lo sea, pero no es algo que siempre se pueda conseguir. Dependiendo de la calidad de la piel, la estructura ósea o el tono muscular, es más o menos probable que aparezcan estas asimetrías prácticamente imperceptible.
  • Shock hipovolémico. El shock hipovolémico es muy raro y aparece con mayor frecuencia cuando la liposucción se realiza en muchas áreas del cuerpo y se extraen grandes cantidades de grasa. Cuando sucede, se necesita hospitalización y tratamiento adicional. Pero, por suerte, es algo muy infrecuente. Por eso, es tan importante realizar una analítica de sangre preoperatoria para saber los valores de los que partimos antes de llevar a cabo la intervención.

Como puedes ver, existen ciertas complicaciones y riesgos en la liposucción, pero son muy infrecuentes y, si te pones en buenas manos, la probabilidad de que aparezcan es muy baja. Además, como has podido comprobar, la mayoría tienen solución con tratamientos complementarios.