¿Cuáles son los cuidados después de una cirugía de nariz?

La cirugía de nariz es una de las demandas más habituales en las clínicas estéticas. Lo solicitan tanto hombres como mujeres, y para la tranquilidad de los pacientes, no es una operación que requiera un postoperatorio muy prolongado. En muchos casos el paso por quirófano para realizar una rinoplastia tiene un fin meramente estético, pero también que hay muchos supuestos en los que la intervención es absolutamente necesaria para mejorar la calidad de vida del paciente. ¡Veamos qué cuidados después de una cirugía de nariz son los que debemos tener en cuneta!

Cuidados después de una cirugía de nariz

Después de la intervención, hay una serie de consejos que provocarán que la recuperación sea más rápida, reduciendo las molestias. Desde nuestra clínica estética en Valencia te recomendamos que los sigas, aunque cada cirujano los adaptará según las necesidades del o de la paciente:

Adecuar la dieta

Después de una rinoplastia, se aconseja hacer una dieta líquida durante el primer día: sopas, purés, infusiones… pues la apertura de la boca está limitada debido a la inflamación. A partir del segundo día ya puedes recuperar paulatinamente la alimentación habitual, en función de cómo te vayas encontrando.

Recomendamos no sonarse después de la operación hasta pasadas dos semanas para evitar que pueda producirse alguna hemorragia.

Mantener reposo absoluto

La rinoplastia no es una operación peligrosa, pero eso no quita que tras toda intervención quirúrgica haya que tener cuidado con los movimientos intensos y bruscos. Durante las primeras 24 horas el reposo debe ser absoluto, y en los 4 o 5 días siguientes hay que llevar a cabo un reposo moderado. Se podrá hacer deporte una vez pasen las primeras 3 o 4 semanas.

Queda prohibido sonarse la nariz

Como especialistas en estética, recomendamos no sonarse después de la operación hasta pasadas dos semanas para evitar que pueda producirse alguna hemorragia. Por este motivo, también hay que evitar reír, llorar o gesticular con la cara. Los estornudos no podemos evitarlos, pero hagámoslo con la boca abierta para reducir la presión y evitar los sangrados.

postoperatorio rinoplastia

Realizar lavados nasales

El uso de agua de mar para la limpieza de la nariz es la mejor alternativa para reducir las molestias causadas por las heridas y las costras interiores. Además, este tratamiento ayuda, a la vez, a mantener las fosas nasales hidratadas.

La congestión nasal, algo habitual

La congestión nasal aparece casi siempre después de una intervención de nariz durante los primeros días. Pero no te agobies, puedes utilizar sprays descongestionantes, siempre que hayan sido indicados por el cirujano que ha realizado la intervención. Si el paciente nota alguna molestia, como sequedad, picor o estornudos, hay que ponerse en contacto con el médico para evitar complicaciones.

Beber mucha agua

El paciente tendrá que respirar por la boca mientras lleve el taponamiento nasal, lo que provocará que la zona se reseque. Beber agua aliviará este síntoma e incluso hidratar los labios durante estos primeros días con una crema labial.

Usar un humidificador

Para intensificar la hidratación, podemos usar un humidificador, especialmente durante la noche. Al agua de este aparato se le pueden añadir sustancias descongestionantes como mentol o eucalipto para potenciar el efecto.

No automedicarse

El paciente que se haya sometido a una rinoplastia no debe tomar más medicamentos que los prescritos por su cirujano. En caso de tener una patología previa, deberá consultar su compatibilidad con el cirujano antes de la operación.

En menos de una semana aproximadamente todas las molestias desaparecerán.

Aceptar los cambios emocionales durante el posoperatorio

Después de la operación, la cara se hinchará y surgirá alguna molestia. Aunque es algo totalmente normal, en ocasiones genera una afectación emocional en el paciente. Hay que esperar a que la recuperación se complete, no obstante, si esta situación no mejorase con el paso de las semanas, es aconsejable acudir a un especialista.

Acudir al cirujano en caso de urgencia

Si aparece algún problema en la vista, el paciente sufre dolor fuerte que no remite con antibióticos, tiene fiebre por encima de los 37,5 grados o sufre secreciones acuosas y claras, hay que acudir al médico de inmediato. No obstante, estos contratiempos son excepcionales.

Es un proceso no doloroso, pero sí algo incómodo durante los primeros 2 o 3 días debido al taponamiento nasal. En menos de una semana aproximadamente todas las molestias desaparecerán. Una vez ya estemos recuperados, podremos retomar nuestra vida normal y disfrutar de nuestra nueva imagen. Eso sí, se recomienda aplicar a diario crema de protección solar de pantalla total en la zona hasta que hayan pasado, al menos, tres meses desde la operación.

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