Melasmas: las manchas en la cara más odiadas

El melasma es un problema de la piel muy común entre la población, sobre todo en las mujeres. A la mayoría de las personas afectadas les aparecen manchas sobre las mejillas, el puente de la nariz, la frente, el mentón, y justo encima de la boca, en el labio superior. Pero también pueden aparecer manchas en otras partes del cuerpo que estén expuestas al sol, como el cuello o los hombros. Aunque no son malignas, estas manchas son muy molestas estéticamente.

¡No te preocupes! El melasma se puede mejorar. En nuestra clínica estética Dr. Alberto Marina sabemos cómo tratar estas manchas. Te contamos todo acerca del melasma en este post.

¿Qué es el melasma?

El nombre de melasma deriva de la palabra griega “melas”, que significa negro u oscuro, ya que consiste en la aparición de manchas marrones y grises en la cara, que dan un aspecto de “suciedad”.

El melasma es una enfermedad que produce unas manchas simétricas en la piel debido al aumento de melanina a nivel de la epidermis y/o la dermis. Esta enfermedad aparece de forma más frecuente en personas con fototipos altos, es decir, con la piel más oscura.

Las causas más habituales están relacionadas con la predisposición personal y hereditaria a padecer esta enfermedad. También existen factores desencadenantes como la exposición solar y otros relacionados con los cambios hormonales, como el uso de anticonceptivos orales, el embarazo o alteraciones de las hormonas tiroideas.

Existen dos tipos de melasma:

  • Melasma epidérmico: el exceso de melanina se deposita en la capa más superficial de la piel.
  • Melasma dérmico: la enfermedad en la piel se produce en las capas más internas.

Es muy importante acudir al medico especialista ya que estos tipos de melasma solo pueden diferenciarse mediante la exploración con luz de Wood. Con esta luz, el melasma superficial se acentúa y el profundo se atenúa.

melasmas manchas en la cara

Cómo se cura el melasma en la cara

Para poder controlar la aparición de melasmas tenemos que controlar el exceso de melanina. Para ello podemos recurrir a despigmentantes como el ácido tranexámico, ácido kójico, ácido tióctico, 4-Butilresorcinol, ácido azelaico, alfa-arbutina, antioxidantes como las vitaminas C y A, el ácido ferúlico, entre otros.

Con ellos conseguiremos:

  • Unificar el tono de la piel.
  • Potenciar la actividad antioxidante.
  • Interferir la biosíntesis de melanina e inhibir la tirosinasa.
  • Evitar y aclarar pigmentaciones indeseadas.

Estos activos los podemos encontrar en cremas de aplicación tópica. También los encontramos en peelings químicos y soluciones para ser aplicadas mediante micropunción. Otros tratamientos médicos pueden ser el láser o, en algunos casos, el IPL (luz intensa pulsada).

El melasma es uno de los problemas más difíciles de eliminar porque aunque mejore con los tratamientos, con el paso del tiempo, la exposición incluso a la luz visible y los picos hormonales, vuelve a aparecer en la mayoría de las pacientes. Cuando mejora es en la menopausia, cuando bajan los niveles hormonales.

Tratamientos para mejorar el melasma

En el caso de tener muchas manchas o muy persistentes, tendremos que adaptar nuestros protocolos de manera individualizada. Existen tratamientos más invasivos como la terapia láser, que penetra en las capas intermedias de la piel despigmentándola gracias a la acción de los rayos de baja potencia.

En nuestra clínica utilizamos la técnica láser más avanzada, por eso confiamos en la tecnología láser Etherea.MX y su manípulo GoSmooth. Este láser fraccionado está creado exclusivamente para el rejuvenecimiento facial y corporal. Está indicado para reducir las cicatrices, las arrugas, las estrías y también el melasma. Además, también es muy efectivo en tratamientos capilares.

Puede ser que la palabra láser nos cause cierto temor, pero este tratamiento asegura la eficacia y la seguridad terapéutica para cualquier región corporal en hombres y mujeres. Además, si quieres mejorar el melasma en nuestra clínica, te confeccionaremos un protocolo exclusivo tras realizar un diagnóstico completo personalizado. Una vez conozcamos tu piel, estableceremos un plan de tratamiento que te permita rejuvenecer tu rostro sin interrumpir tus actividades diarias. ¡Que nada te pare!